Las veces que asistimos al Arenal Sound salimos con sensaciones encontradas, grandes carteles, pero organización y una infraestructura que no estaba a la altura. La última edición que estuve, la de 2012, el agobio y enfado me hizo salir el viernes cortando la pulsera y no volviendo a entrar al resto del festival, pero uno debe ser reflexivo y tolerante, y este 2014 decidí volver, y la verdad es que salimos muy contentos. La mejora de servicios, trato a la prensa y recinto han sido notables, y aunque tienen (pasa hasta en las mejores familias) algún fallo, los van subsanando para esbozo y alegría de los usuarios. Con todo el papel vendido, nos dispusimos a embarcarnos en una nueva aventura Sounder….
El jueves arrancamos con la verbena ofrecida por La Pegatina. Su gran capacidad festiva que poseen los catalanes es innegable, pero su propuesta repetitiva no hizo más que invitar una y otra vez a las palmas. Al enésimo arranque ska de sus canciones acabas por caer en el aburrimiento, mientras que la sucesión de versiones de gente como Mago de Öz te sumerge de lleno en las fiestas de tu pueblo. Lo cierto es que este es el propósito de La Pegatina: lograr una fiesta donde importe o no la música y su elaboración. Lo volvieron a conseguir en el Arenal, así que enhorabuena por ellos y todos los que disfrutaron. Elefantes en su vuelta a los escenarios se dedicaron a tirar de clásicos en su discografía para satisfacer al buen número de seguidores de toda la vida que se concentraron en el escenario Negrita. A Shuarma y compañía se les nota que han vuelto con ganas ¿será para quedarse?
Con miedo a vivir un nuevo día de la marmota fuimos a ver a Love of Lesbian. La larga gira que supuso La NocheEterna. Los Días no Vividos aún sigue y venían esta vez con un nuevo espectáculo que lleva por título El Poder de la Tijera. La sensación de que les hace falta un largo descanso es más que evidente, pero el nuevo espectáculo que nos presentan Santi Balmes y los suyos se basa en una serie de proyecciónes un tanto paranoicas por momentos, pero que sin lugar a dudas representan ese espíritu irónico que la banda ha adoptado en los últimos tiempos. Con un setlist muy potente donde recuperaron temas como ‘Historia del Amante Guisante’, ‘667’ o ‘El Ectoplasta’, volvieron a triunfar dando muestras del fenómeno que han supuesto para la música nacional en este siglo XXI. El único inconveniente de su directo vino provocado por fuerzas ajenas como un inoportuno apagón de luz, algo que no impidió que regresasen aún con más ganas. También hubo guiño a La Pegatina con la colaboración de estos en ‘Víctimas del Porno (a tu laíto)’ devolviéndole la jugada a Santi Balmes en su concierto anterior. Seguidos venían L.A. una de las bandas con más proyección internacional de nuestro país, nos demostró de nuevo lo bien que se les da tocar en escenarios grandes y con un volumen ensordecedor. Recogiendo temas de todas sus etapas, L.A. combinaron a la perfección la clara influencia de géneros americanos en su música junto con sus particulares ambientes reflexivos de canciones como ‘Over and Over’. Arrancando con ‘Outsider’ y tomando temas como «Hands’ dejaron una gran sensación a victoria. Pasamos luego momento bochorno con Azealia Banks no ha cambiado ni un ápice sus directos pachangueros basados en la exhibición total de ella y sus acompañantes en el escenario al ritmo de cierta música, viendo como estos subproductos son cada vez más comunes en los festivales en detrimento d epropuestas de mayor calidad. Así que nos sumergimos con ganas en la propuesta de French Films y la convergencia de diferentes estilos en su música. Los finlandeses nos demostraron que para nada son un hype, y vienen para quedarse, estuvieron enormes. Pero para enormes los titanes de Crystal Fighters dejaron un ejercicio de potencia y saber estar sobre las tablas que convirtieron a esta ecléctica banda en claros vencedores de la jornada.
El viernes tomamos pronto posiciones y llegamos para ver terminar a Triangulo de Amor Bizarro, injustamente colocados en un horario tan intempestivo, los gallegos lejos de amilanarse, derrocharon músculo y potencia a sus canciones, confirmando mis teorías anteriores, que son una de las bandas más potentes del panorama nacional actualmente. Sidonie volvieron a hacer lo que mejor saben, empacar canciones fáciles que entran como tiros, y aunque la respuesta del público no fue generalmente entusiasta, supieron ganarse poco a poco el favor de la gente con temas como ‘Fascinado’, ‘Sierra y Canada’ o ‘Nuestro Baile del Viernes’. Izal es de esos fenómenos que no tienen explicación para un servidor, y con una propuesta que plagia de manera escandalosa a otras bandas patrias aún así reúne a miles de fieles, a mi que me perdonen, pero mi no entender. Luego Miles Kane dió una clase magistral de rock, pose y actitud, dejando a los miles de jóvenes que bebían fuera sin ver una lección mastra y regalando a los presentes un compendio de temas bailables, y el chaval no tiene ni 30 años, una joya y un lujo para el Arenal traer semejantes monstruos. PEACE y The Wombats repartieron dosis bailables al personal, que conform más vanzaba la noche más crecía la masa, que dejaban los restos de bebida fuera y entraban a bailar, para culminar la noche ElyElla Dj’s formaron una gran fiesta, que se empañó por el embudo que acudía a verlos y nos hizo abandonar para volver el sábado con las pilas cargadas.
El sábado, la tremenda tromba de agua que cayó en Castellón, lugar donde teníamos nuestra base de operaciones, hizo que no pudiéramos pisar el recinto hasta la actuación de Placebo. Hacía 4 años que no disfrutaba de su directo, y la espera me dejó un saber agridulce. Tienen aún las canciones y la calidad, pero la elección del setlist fue nefasta y cada vez parecen más una parodia de ellos mismos. The Royal Concept hicieron que empezáramos a bailar quemando suela y nos puso en antecedentes de lo que nos esperaba con Boys Noize, cuando el cuerpo lo pidió fuimos a disfrutar de Ley DJ que dejó una tremenda sesión, salpimentada con la colaboración de Lourdes Trujillo, vocalista de Arcana Has Soul, que hizo bailar hasta la extenuación, pero como teníamos las pilas cargadas, aun seguimos con Kostrok hasta el amanecer.
El domingo me reconcilié con Ivan Ferreiro, que su aspecto de crooner no deja de engañar y nos acabó mostrando todo el potencial que tiene dentro, y la magia de sus canciones acabó cautivándome y haciéndome volver a su redil. El Columpio Asesino si hace una semana en el Low eran puestos a las 3 de la mañana, aquí tocaba a las 9 de la noche, no hay punto medio, pero eso no importó, y demostraron su enorme talento y nos dejaron con ganas de verlos nuevamente en el Deleste Festival el próximo 24 de octubre. Bastille son otro fenómeno que se escapa a mi entendimiento, perdonen ustedes, pero no voy a escupir bilis y paso palabra. Fm Belfast fueron una grata sorpresa y a base de versionar temas clásicos (Wonderwall de Oasis entre otros) se ganaron un lugar en mi corazoncito. Corazón que sufrió y de lo lindo al ver en que se han transformado Mando Diao, los suecos, otrora grandes músicos del rock más sucio, son ahora…son ahora algo muy raro, desde sus vestimentas a su manía de electrificar y ridiculizar su sonido, aplicándoles la máxima de «Tu antes molabas», pero no, ya no. Y llegaba la actuación de Die Antwoord. Miedo tenía a esto, y la verdad es que me tuve que tragar mis prejuicios, ya que los sudafricanos con un sonido muy new rave, dejaron un liston muy alto con dosis de baile acelerado, adrezados por la extraña voz de su vocalista, pero que tenía al final un puntillo que gustaba. Y ya cerramos filas con los DJ’s de la playa, con Pablo Cebrian en todo lo alto del Beach Club y con ganas de volver en 2015. Arenal Sound, nos hemos reconciliado.
Xavi Hernández