Visor Fest cierra su cuarta edición no como un festival, sino como una familia. Durante todo el fin de semana se ha demostrado que lo importante no es el lugar ni la hora, sino la comunidad que año tras año se reúne alrededor de la música. Un espíritu familiar que se ha ido forjando desde la primera edición en aquel lejano 2018 y que sigue manteniéndose este 2024. Amigos que vienen desde Tenerife, parejas que viajan desde Alemania, o esa familia que viene desde Toledo con sus hijos año tras año, todos con un único propósito: disfrutar la música en directo, recordar buenos momentos, vivir otros nuevos, y reencontrarse con quienes comparten la misma pasión.
Y con ese espíritu arrancamos la segunda jornada el pasado sábado 28 de septiembre, concretamente con la responsabilidad en los platos de Javi Golo, que nos dio la bienvenida de la mejor manera posible. Desde el minuto uno, desplegó un repertorio de temazos que encendió al público. Tener a un productor de su trayectoria y nivel en Visor Fest era ya un lujo conocido, pero su actuación fue aún más impresionante de lo que todos pensábamos.
Immaculate Fools fue la primera banda que subió al escenario, y como ya es costumbre, no defraudaron. La conexión entre Kent y Galicia sigue tan viva como siempre gracias a Kevin Weatherill, quien nos transporta a su universo mágico, donde no existe ni el tiempo ni el espacio. Lograron congregar a sus fieles seguidores desde primera hora de la tarde, y los afortunados ganadores del Meet & Greet, pudieron disfrutar de una especial firma de discos tras el concierto. ¡Qué lujo!
Gigolo Aunts nos regalaron un concierto muy emotivo, más sabiendo que era su último concierto en España antes de su despedida definitiva. Un adiós que tocó las fibras más sensibles de todos los presentes. Nos invadió la nostalgia, cantamos, lloramos y disfrutamos cada segundo de su power pop, conscientes de que era un momento que no se volvería a repetir. La celebración de los 25 años de «Minor Chords And Major Themes» no pudo ser más simbólica, con la edición especial en vinilo que se vendía durante la gira agotándose en apenas unos minutos.
Después, MEdj nos llevó al país de las maravillas con su energía y su impecable selección musical. Su set, cargado de poder femenino, fue simplemente apabullante, y no permitió ni un segundo de descanso entre concierto y concierto.
Los belgas dEUS tomaron el control desde el primer acorde. Fueron contundentes e intensos, logrando conquistar tanto a sus fans más devotos como a aquellos que los descubrían por primera vez. Muchos medios locales ya lo catalogan como el mejor concierto del año en la Región, y no es para menos.
Y entonces, llegó el caos controlado de Kula Shaker, la banda encargada de cerrar la jornada. Su rock-psicodélico encendió al público, y la energía no paró de crecer hasta alcanzar un clímax que nadie quería que terminase. Fueron el broche de oro que necesitábamos, creando un ambiente de pura euforia que quedará grabado en nuestra memoria.
Finalmente llegó el turno de We Lost Control. El proyecto nacido para esta edición fue concebido como una épica batalla musical entre los años 80s y 90s, con una brutal selección de temas al cargo de Alesa y Kutxu. Una batalla donde todos ganamos, y si no que se lo digan a aquellos que cantamos a pleno pulmón «Getting Away With It» de James, la canción que cerró el festival.
Un cierre a la altura de un festival que ha luchado contra viento y marea tras el inesperado cambio de recinto, y que como dice la letra del bueno de James, ha logrado salirse con la suya, creando un ambiente único para las 11.000 personas que pasaron durante el fin de semana.
Visor Fest quiere agradecer a cada uno de los asistentes, a cada una de las bandas y a todo el equipo por hacer de esta edición una experiencia inolvidable.
