El frio en Madrid aparece y la sala La Riviera nos ofrece un refugio perfecto para el mismo. En esta ocasión vamos a ver a Besmaya, segunda vez para este redactor, en su gira Vibra Mahou. Un grupo joven, pero ya muy asentado, solo hay que ver la legión de fans que mueve cada vez que deciden tocar en directo, en este caso, en Madrid, llenar un escenario como el que nos encontramos no es fácil y el grupo lo ha hecho con creces.
La noche empieza con fuerza, la escenografía muy conseguida, con cierto toque nostálgico de principios de los 2000 (esas mangas largas debajo de camiseta de manga corta). Empezaron por interpretar el disco debut “Nuevos Lemas” interpretando la tracklist en el mismo orden que el disco, esto es un hecho algo raro, que demuestra que el disco está elegido a la perfección para incluso levantar una sala como la Riviera.
El segundo bloque del concierto sirvió para tocar temas antiguos. Estos temas les hicieron coger una gran masa de fans y hacerse conocidos, muchos hemos podido ver a chavales tararear melodías como “El cable” a gente que ni nos imaginaríamos, esto es un gran hito ya que acerca este tipo de pop a un público muy amplío. Esta fue una de las canciones que levantaron aún más a la sala, así como “Frágiles” tocada conjuntamente con el productor del disco Paco Salazar a la guitarra.
Todo esto a un ritmo frenético, que permitió a los asistentes comprobar que esta banda va a tener que ser muy tenida en cuenta, no solo por su frescura, si no por el buen rollo que transmiten y la manera de levantar el ánimo.
Texto y fotos: Eduardo del Olmo
