Canela Party, presentado por SON Estrella Galicia, se ha convertido no solo en ese gran pitote que nadie en su sano juicio quiere perderse, sino también en uno de los festivales más singulares y atrevidos de nuestra geografía. Basta echar un vistazo cada año a su cartel, un oasis sonoro donde conviven por igual animales escénicos, fieras veteranas y jóvenes bestias, para corroborar que en el mapa festivalero de nuestro país hay pocos ecosistemas comparables.
Y si su 17ª, ahí es nada, edición prevista para los próximos 20, 21, 22 y 23 de agosto una vez más en la localidad malagueña de Torremolinos ya presentaba a estas alturas un zoo musical de órdago, la última camada que nos llega hoy pone un broche final de auténtico ensueño. Empezando por shego, esa banda a la que su última disco «No lo volveré a hacer», publicado el pasado febrero, ha aupado a lo más alto, pasando de ser una firme promesa a todas unas estrellas del rock patrio.
Hablando de rock, los estadounidenses Frankie and the Witch Fingers llegarán desde Los Ángeles dispuestos a arrasar con su soberbia puesta en escena y ese vendaval sónico suyo, tan psicodélico como punk, tan feroz como imprevisible.
Otro vendaval sobre las tablas promete ser la rapera sudafricana asentada en Australia Ecca Vandal. A pesar de contar con solo un álbum (el homónino «Ecca Vandal», lanzado en 2017) y un puñado de sencillos, ha sabido hacerse un nombre en la escena hardcore gracias a su entrega al punk rock y su coqueteo con el metal, lo que le ha valido para colarse esta temporada en citas tan respetadas como el Fuji Rock de Japón o el Reading Festival en Reino Unido. Ojo con ella.
Como atención hay que depositar también en una de las bandas más prometedoras de nuestra escena, La Milagrosa, formación madrileña a la que su último álbum, el más que inspirado «Ya no me duele mal» ha afianzado como necesarios exponentes en nuestra escena de esa música que elude etiquetas –¿dream punk? ¿post pop?– para encontrar una voz propia.
Otros que buscan en su último trabajo expander su música hacia otras direcciones, evitando encasillarse en un género como el jangle pop, son los canadienses Ducks Ltd.. Su álbum «Harm’s Way», editado el pasado año, amplifica hasta extremos insospechados el encanto de las melodías de los de Toronto, en un repertorio impecable que bebe por igual de los Feelies, los Violent Femmes o los mismísimos Beat Happening. Top.
La luminosidad de los canadienses son el contrapunto de la oscuridad inherente a palmeras negras. Los almerienses se revelaron como una de las más gratas sorpresas de la pasada temporada gracias a un larga duración tan sólido como soberbio, «s/t», una tormenta que bascula del post-hardcore al slowcore con arrebatos math rock y tanta actitud como acierto.
Actitud a raudales tienen Maria Iskariot, con la carismática Helena Cazaerck al frente. Las belgas, todo un torrente art-punk, se han ganado a pulso que bandas como Tropical Fuck Storm –también presentes en este Canela Party, cómo no– se hayan rendido a sus impresionantes directos o que Montgrí, el aguerrido sello fundado por Cala Vento, no haya dudado un segundo en ficharlas para su escudería.
Igual de libérrimos en su propuesta y tan dados también a regalar directazos inolvidables son Sal del Coche, una de las propuestas más inesperadas que nos ha regalado la escena nacional en los últimos años. Entre la new wave y el punk funk, si los vizcaínos hubieran nacido en Nueva York ha nadie les habría extrañado un ápice.
Si hablamos de propuestas recién llegadas, aunque Kokoshca sean todo unos veteranos, con dieciséis años a sus espaldas, su último trabajo discográfico, y noveno por más señas, «La juventud», irradia tras su sorrentiniano título una bocanada de aire fresco, un disco que te invita de principio a fin a disfrutar del presente antes de sermonearte con aquello de que cualquier tiempo pasado fue mejor.
Justo de formaciones pasadas nace el presente de Serpiente Orión, la banda malagueña que tiene el honor de cerrar el cartel de esta 17ª edición de Canela Party. Sus miembros, procedentes de otros grupos tan conocidos en la escena sureña como Santo Rostro, Habitar La Mar, Selfmade, The Oddballs o The Skirmish Society, han encontrado un cruce de caminos donde dar rienda suelta a su pasión por los sonidos de alto octanaje. O como ellos mismos confiesan: «Perros viejos con nuevos trucos«.
Además, el festival contará un año más con la colaboración de SON Estrella Galicia, el proyecto musical cervecero más consolidado del panorama que busca impulsar proyectos llamados a transformar la escena.
Como apuntábamos al principio de estas líneas, esta decena de artistas se suman a los ya confirmados hasta el momento y que, como se puede comprobar, ya eran un reclamo de primera para visitar Torremolinos el próximo agosto. En riguroso orden alfabético: Aiko el Grupo, Amenra, Axolotes Mexicanos, bar italia, Biznaga, Blonde Redhead, Bum Motion Club, Casero, Depresión Sonora, Derby Motoreta’s Burrito Kachimba, DIIV, el diablo de shanghai, Fat Dog, The Get Up Kids (celebrando el 25º Aniversario de «Something To Write Home About»), Grande Amore, Joyce Manor, Lambrini Girls, Les Savy Fav, Maple, Maruja, MJ Lenderman & The Wind, Mourn, Parquesvr, Somos la Herencia, Tatxers y Tropical Fuck Storm.
En total, y a la espera de conocer todavía los djs que animarán la zona Gromenauer, 36 razones de peso para no perderse la nueva edición de Canela Party, aunque sea el único festival del mundo al que los artistas son los que en realidad van a ver al público. Porque, recordemos, más allá de su abultado y estelar cartel, los auténticos protagonistas aquí son el fandom canelo y su ingenio para los disfraces. Si aún no lo has comprobado, yo de ti, forasterx, no me lo perdería este año. ¡Que no te lo cuenten!