El baile y la música tradicional son dos códigos que definen muy bien la música de Baiuca, pero también es algo que define lo que es una ‘foliada’. No es raro que «Barullo», el tercer álbum del artista y productor catoirense, consiga retorcer, amplificar y resignificar la idea de ‘foliada moderna’ en una obra que lo encumbra y confirma como uno de los artistas más vanguardistas, impredecibles e inabarcables de los últimos años.
«Barullo» acerca más que nunca a la pista de baile a un Baiuca que, sin desprenderse de la conexión con la música tradicional ibérica y gallega en concreto, se ha permitido más licencias electrónicas que nunca. Aunque sus canciones tengan estructuras de piezas de pop alternativo en un concepto especialmente amplio; en este nuevo ejercicio géneros como el breakbeat, el deep house, el UK Garage o el trance tienen más presencia que nunca en unas composiciones que suenan tanto a clásicos raveros como a clásicos folklóricos.
Coproducido junto al asturiano Sergio Pérez (mitad del dúo SVPER y productor detrás de trabajos icónicos de El Guincho, Cariño, Mujeres, Joe Crepúsculo o La Bien Querida, entre otros) y con colaboraciones en la producción de Anxo Ferreira (que ha estado detrás de producciones de Sen Senra, Novedades Carminha, María Blaya o Guillem Gisbert) o en la composición de Lucas de Centi (líder de Néboa, Mocho Gris y Mel); el álbum es un crisol de sonidos en donde la electrónica ha sido el vehículo para rearmar el imaginario folktrónico.
Contando con colaboraciones ilustres de artistas tanto de la escena musical gallega alternativa como es el caso de Carlangas, como también de la música folk como Antía Ameixeiras (mitad de Caamaño & Ameixeiras y un tercio de Maricarme), Xurxo Fernandes (líder de su propio proyecto en solitario o de PAN.SEN.FRON. o Jako el Muzikante) o Felisa Segade (una de las icónicas voces de las extintas Leilía), además de colaboradores habituales como Lilaina (el grupo de pandereteiras-cantareiras que lo acompaña en directo casi desde sus inicios, y que también forman parte del grupo Aliboria) o el percusionista Xosé Lois Romero; «Barullo» consigue retorcer y expandir el sonido de Baiuca sin necesidad de salir de su ciclo de confianza.
Esa idea de sonido autóctono, de espacio desde donde construir identidades sonoras nuevas, convierten este «Barullo» en el mejor álbum del artista y productor gallego hasta la fecha, recogiendo influencias de artistas como Caribou, Floating Points, Skrillex, Jamie XX, Four Tet, DJ Koze o Fred Again; pero sin perder ese carácter casi de arqueólogo musical, que sigue componiendo melodías que suenan a clásicas y recuperando coplas folclóricas anónimas tanto de Galicia como de Portugal, reivindicando una suerte de folklore ibérico especialmente transversal.
El disco, que viene acompañado de un nuevo show con un imaginario estético y lumínico superior, y que ya ha ido presentando este verano en citas como el O Son do Camiño, Tomavistas, Pirineos Sur, La Mar de Músicas, Palencia Sonora o países como Alemania, Colombia, Hungría o Italia; continuará su senda durante un curso en el que ya tiene una extensa gira de salas y, próximamente, se anunciará también los festivales en los que estará presente en 2025.