Yann Tiersen, en solitario. Todo un lujo. Será el 3 de mayo en el Palau de la Música Catalana de Barcelona, dentro del Guitar BCN 2016. Una actuación bautizada como “An Evening With Yann Tiersen solo in concert”, con él haciéndose cargo del piano y el violín, que promete dejar profunda huella en sus numerosos seguidores. De las de enmarcar. Porque como escribió la noruega revista online ‘Here Today’, “Yann Tiersen es de esa curiosa clase de artistas en solitario que no dan la impresión de ser un artista en solitario”. O, en la misma línea, y como se ha apuntado en RFI Music, “este talentoso multiinstrumentista, cuyas encantadoras composiciones raramente incluyen palabras, ha conseguido una excelente reputación gracias a sus bandas sonoras y a sus versátiles conciertos en solitario”. Y así podríamos seguir, por ejemplo recordando al espectador que en los bises de un concierto del bretón en Boston, en enero de 2014, le gritó “¡qué jodida maravilla!” al finalizar la interpretación, en solitario y al violín, de su clásico “Sur le fil”.
Y es que al referirnos a Tiersen hablamos de uno de los músicos más respetados de su generación. De alguien que saltó a la fama internacional en 2001 al filmar la banda sonora del filme “Amélie”, cierto, pero cuya carrera es mucho más que eso, antes y después. Él mismo se desmarca en sus declaraciones del calificativo de compositor de música para películas -”no soy un compositor y tampoco tengo un pasado en la música clásica”- y su biografía lo ratifica desde edad temprana, pues tras estudiar violín y piano desde los 6 a los 14 años, e incluso tantear la posibilidad de ser director de orquesta, se rebeló contra eso e inspirándose en Joy Division y The Stooges cogió la guitarra eléctrica y se adentró en el post-punk durante la segunda mitad de los 80. Fue el primer paso intrépido de una trayectoria que se ha ido alimentando y abrillantando a golpe de extravagancias melancólicas y que ha sabido destilar en una misma botella influencias de lo más variopinto, de la música callejera a la vanguardia, del minimalismo al rock, del vals a la chanson. Al margen de tres bandas sonoras, la citada de “Amélie”, más las de “Goodbye Lenin!” (2003) y “Tabarly” (2008), y de tres álbumes en directo, el último de ellos “On Tour” (2006), su discografía, inaugurada en 1995 con “La Valse des monstres”, cuenta ya con ocho títulos. El último, “Infinity”, publicado en mayo de 2014 y registrado en Islandia.