Tomavistas lo ha vuelto a hacer. Un año más ha llevado a los artistas más interesantes del panorama actual al encuentro de los miles de #AnimalesdeCiudad que han hecho del festival madrileño su hábitat natural.
Su tercera edición ha congregado a 16.000 personas que, durante el fin de semana del 19 al 21 de mayo, han disfrutado de una programación única y diversa: más de 40 proyectos musicales que van desde la electrónica al rap, pasando por los sonidos más indie de la escena nacional e internacional.
El impresionante rock de Holy Bouncer fue el encargado de inaugurar el festival en el Escenario Corona, que también protagonizaron las inglesas The Big Moon, el potente directo de Lori Meyers, el rugido de León Benavente y la gracia irreverente de Los Punsetes, entre otros.
The Horrors cuajaron un concierto espectacular, Temples confirmaron su condición de ilustres herederos de esa tradición inagotable que hunde sus raíces en la psicodelia de tinte sesentero, Goldfrapp cumplieron e incluso superaron cualquier expectativa con una actuación para el recuerdo, Hercules & Love Affair remataron en clave festiva y bailable la intena jornada de apertura, Suuns demostraron que en las zonas menos iluminadas del universo del rock independiente todavía hay tesoros por descubrir y L.A. fueron los encargados de bajar el telón de esta tercera edición, presentando su novísimo «King of Beasts» en plenitud de facultades. En este escenario pudimos vivir incluso momentos no anotados en el guión gracias a Enric Montefusco y su banda, que aprovechó la ocasión para bajar a la pista e improvisar un sensacional acústico arropados por todos los presentes.
Sobre las tablas del Escenario Wegow desfilaron propuestas tan interesantes como el sonido electrónico de Delorean, la psicodelia futurista de Alien Tango o la exquisita voz de Pavvla, además del rap de C. Tangana, el rock de Cala Vento o el inconfundible sonido de Las Odio.
Autenticidad, creatividad y calidad son un año más las señas de identidad de Tomavistas, un festival que muestra su compromiso con la igualdad de género y apuesta fuertemente por el talento femenino: casi el 50% de las bandas que conforman el cartel de esta edición tienen mujeres en sus filas.
Entre actuación y actuación, los festivaleros pudieron recargar energías degustando las propuestas gastronómicas de la zona de food trucks, visitando los stands de Wegow, Repsol y Channel, haciendo camisetas serigrafiadas en el Espacio Corona o refugiándose del sol bajo unas Arnette.
Como novedad, este año se han introducido los tuents by Tuenti como moneda del festival, complementada con la aplicación para móviles Verse como método de pago alternativo para los más tecnológicos.
Todo ello se ha desarrollado en el mejor ambiente posible: el parque Enrique Tierno Galván, uno de los pulmones verdes de la capital que por segundo año consecutivo ha acogido tres días de conciertos y gastronomía en plena naturaleza. El espacio perfecto para acudir en familia y que niños y mayores puedan vivir la experiencia festivalera en todo su esplendor.
Madrid ha vibrado en un entorno musical como pocos. En breve anunciaremos novedades. Larga vida a Tomavistas.
