El festival VÈU (Valencia Èscena Urbana) nació en 2016 como una forma de apoyar a la escena musical valenciana, promovido por HOP Music y 16 Toneladas, contando con grupos consolidados y noveles, como sucedió en su primera edición con Las Máquinas, We Are Not Brothers, Ambros Chapel y Arcano Guzmán. La segunda edición del VÈU reunió a Tórtel, Cuello y Carmina Burana, superando en público a la primera cita tras un arranque tibio, y es que en esta ciudad la coincidencia de dos o tres conciertos el mismo día está siendo algo habitual en los últimos tiempos. Pudo haber registrado algo más de asistencia, esperemos que el año próximo sea la consolidación del festival si de verdad queremos mostrar soporte a la escena local.
Cerca de la medianoche comenzó Tórtel en formato trío, un formato algo raro según comentó Jorge Tórtel pero que funcionó de maravilla, con percusión electrónica, teclista-guitarrista y acústica, presentando temas de su nuevo disco “Transparente” y otras canciones. “Nadie se parece a nosotros”, “La casa de hojas” o “El invitado” son algunas de las que pudimos escuchar, y recuperando “El baile extraño”, como los movimientos de Jorge sobre el escenario con ese juego de piernas desconcertante, o “Queríamos más” de aires latinos. Con “Transparente” encontramos un compositor en estado de gracia, que en directo defiende su pop cristalino a la perfección fruto de su extensa trayectoria, como en esa pequeña maravilla que es “En defensa propia”, rescatada para el álbum. Ojalá Tórtel tuviera más reconocimiento del que tiene hoy por hoy.
Acto seguido se rompieron los esquemas con Cuello, que ofrecieron una brutal actuación con ese rock teñido de punk que practica el cuarteto formado por José Guerrero, Ubaldo Fambuena, Oscar Mezquita y Nick Perry. Baste decir que la contundencia que emplea Oscar a la batería dio como resultado que ésta se moviera durante varias ocasiones en su actuación, a pesar de tener un block de hormigón como tope. No sólo él, sino el resto de componentes hicieron también una entrega innegable durante su actuación. Interpretaron canciones de su último trabajo publicado “Trae tu cara” como “Turboreproche”, “Vístelo con tu éxito” o el trallazo que es “Trae tu cara y decórala bien” además de otras como “Te veo sin valorarte” o “La palabra es clave”. Cuello es otra banda de las mejores que han salido de nuestra ciudad en los últimos años y que poco a poco va obteniendo reconocimiento fuera del circuito local.
Si el año anterior se escogió a Las Máquinas como banda veterana, para cerrar esta segunda edición del VÈU se contó con la presencia de Carmina Burana, un grupo que en la década de los 80 fue incomprendido ya que se apartaba de la corriente nuevaolera que se respiraba en la ciudad. Con un par de discos y algún otro maxi se forjó una etiqueta de grupo de culto tras su separación, ya sea por la peculiaridad de sus letras o el sonido post-punk que adoptaron y que en la actualidad suena plenamente vigente. Tras un par de conciertos de reunión en 2010 y 2013, esta fecha de Carmina Burana en el VÈU fue realmente impecable, con un sonido excelente, y no han perdido fuelle tras estos años. El bajo sonaba demoledor con todos sus pedales a pleno rendimiento, la batería contundente y el sonido característico de la guitarra y la voz, con los movimientos espasmódicos de su vocalista nos llevaba de vuelta a la década de los 80. Por supuesto que sonaron “El telar de la locura” y “De las danzas apócrifas”, sus más reconocidas composiciones, así como “240 dias de mayo” o “La tierra feliz”, repitiendo para finalizar en el bis “Estereo afonía” que colmó las expectativas del público.