Sigmund Wilder surgió de la nada a primeros de 2017. Un individuo llamado David Martínez que llevaba años trabajando en su más absoluta intimidad para que su ópera prima fuera un trabajo sólido, íntegro y sobretodo muy personal y genuino. Para ello, a modo de master en Harvard, pasó casi cuatro décadas sumergiéndose noche y día en la discografía de artistas como The Cure, David Bowie, Depeche Mode, Interpol o Echo & The Bunnymen. De la mano del prestigioso guitarrista David Palau, a cargo de la producción del álbum, y con 12 canciones que narraban desoladoras historias de desamor y desesperación alternadas con momentos de luz y esperanza, ‘The Art Of Self Boycott’ cosechó críticas dignas de autores consolidados.
A Sigmund Wilder sólo le preocupan dos cosas en su aventura artística. La primera, es que nadie ajeno su núcleo (entiéndase como Martínez/Palau) condicione su arte. La segunda es disfrutar de la aventura y de todo lo que de ella surja. Sigmund Wilder presume de ser un arte 100% independiente. Se cocina en casa y se sirve en plataformas sociales y redes sociales. Su gestión y sus estrategias también. No les importa el número de veces que suban a un escenario, les importa que cada una de las veces que lo pisen sus canciones toquen el alma de los presentes. En tiempos en que todo se mide por cifras y en millones de reproducciones, Sigmund Wilder tienen una cifra mejor de la que presumir: 15 canciones llenas de alma que ya captaron un considerable séquito de seguidores con su primer álbum.
Las nuevas canciones de Sigmund Wilder, incluidas en su nuevo disco ‘The Day David Bowie Died’, tienen un rumbo más amplio en cuanto a gama de colores. Ha habido un cielo mucho más azul sobre sus cabezas a la hora de crear su nuevo trabajo. Sin perder la firma nostálgica y melancólica que resumía su primer disco ni la personalidad intimista e introvertida de la voz de David Martínez, Sigmund Wilder nos presentan sus temas nuevos contando la historia de dos personas que deciden construir un nuevo mundo a su alrededor en el que el amor del uno por el otro es el eje central de todo. Nos cuentan una historia de amor que tuvo su inicio en el día de la muerte de Bowie, un día que el autor de la canción define como uno de los más tristes de su vida. Sigmund Wilder presentarán ‘The Day David Bowie Died’ el próximo 2 de marzo en la sala Bikini de Barcelona.