Arrancábamos la nueva temporada de conciertos con el 10 sobre 10 de Cervezas Alhambra, esta vez con el incombustible Joe Crepúsculo, la electrónica siempre efectista de Los Pilotos y el descaro de unos cada vez más al alza Carolina Durante. El marco la sala Ram Club de La Rambleta que se ha erigido como una de las sedes favoritas de la escena.
Los Pilotos fueron los primeros en salir a escena, Florent y Banim de los Planetas, acompañados por un percusionista y un teclista, tienen este proyecto paralelo para dar rienda suelta a su pasión por la electrónica. Venían con nuevo trabajo Alianza Atlántica (Vigilad los Cielos, 2018) que tiene como novedad las voces que han metido ya que hasta ahora sus trabajos eran meramente instrumentales. Para tal efecto contaron sobre el escenario con la colaboración de Míriam Puig de los setabenses Ghost Transmission en el tema «Nubes de fuego» y la final colaboración de Joe Crepúsculo en «Guerra en la Tierra».
Carolina Durante tomaron el testigo tras un rápido cambio de instrumentos, en su primera visita a Valencia llenaron ya la sala con un público totalmente entregado a su vigor y descaro. «Canciones de Juanita» dio el pistoletazo de salida a una actuación frenética y efervescente donde los pogos se sucedieron a la misma velocidad que los pobres miembros de seguridad de la sala intentaban poner algo de orden con escaso éxito. Con un amplio margen de mejora todavía, fueron un tornado desgranando los temas de sus EP’s. Hasta se permitieron una versión de «Autosuficiencia» de Parálisis Permanente, dejando en los últimos coletazos su famoso «Cayetano» con invasión del escenario y delirio colectivo.
Parecía que el público había agotado sus cartuchos pero aun había gasolina para quemar la pista con un Joe Crepúsculo que acompañado de Aaron Rux a los teclados dejó una ristra de temas como «Te voy a pinchar», «Rosas en el mar», «Pisciburguer», «La canción de tu vida», «Suena brillante», «La verdad», la ultracoreada «Mi fábrica de baile» para un ya descamisado Crepus usó para cerrar, con asalto al escenario generalizado y los miembros de seguridad de la sala ganándose su jornal debidamente.
Texto y fotos: Xavi Hernández